Organizacion Cannabis Libre Emprende Campana Educativa En Puerto Rico

South view of the building, located in the Puerta de Tierra district of . (Photo credit: Wikipedia)

La organización Cannabis Libre ha emprendido una misión educativa sobre los usos, beneficios y efectos negativos de la marihuana para que en el país se creen las condiciones necesarias que desemboquen en la descriminalización de su uso.

Como primer paso, sus integrantes quieren insertarse de lleno en la discusión del proyecto de ley presentado por el senador Miguel Pereira para permitir que adultos de 21 años o más puedan poseer de forma legal hasta una onza de marihuana.
 Aunque lo ven como un buen comienzo, están claros en que requiere enmiendas importantes.
“Entendemos que el proyecto de Pereira va en la dirección correcta. Sin embargo, hay que hacer unas enmiendas para poder atacar, por ejemplo, el problema de dónde se consigue el cannabis. Mientras siga siendo ilegal, que la persona tenga que ir al punto de droga a consumirla, seguimos teniendo el problema real”, opinó el abogado y profesor José A. Rivera Jiménez, quien conversó con este medio antes de la caminata que realizó el grupo hacia el Capitolio en ocasión de la Marcha Global por la Marihuana este sábado.
 

Pereira ha dicho que su iniciativa busca, primeramente, despenalizar la posesión de marihuana para el consumo, pero no ha precisado cómo se adquiriría legalmente.
“Una de las enmiendas favorables, y en eso coincidimos con Iniciativa Comunitaria, es que el Estado debe regular una cantidad determinada de posesión para que las personas puedan tenerla en su casa y sembrar su propia planta”, agregó Rivera Jiménez.
Rafael Andrés Escribano, doctor en lingüística y ex profesor universitario, amplió ese punto.
“Yo creo que un paleativo inicial debería ser en términos de matas. Vamos a legalizar que uno pueda tener 15 o 20 matas con moña en su casa y que eso no sea ilegal”, señaló el estudioso del tema y autor del libro “FUMAndoMAFÚ: Materiales para la historia de la mariguana en Puerto Rico".
Escribano también fue más severo con la medida de Pereira: “legalizar una onza... es casi como darle un dulcecito a un nene para que se calme, y no resuelve el problema de comprarla, que es el verdadero problema”.